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El máximo anotador de la NBA es Joel Embiid (Philadelphia 76ers) con una media de 35 puntos por noche. En 30 por partido hay cinco jugadores, en 20 la lista crece hasta los 42 que marca comolímite Dejounte Murray (Atlanta Hawks) al promediar 20,2 en sus 31 partidos disputados en al temporada 2022-23. En la NBA se mete mucho, claro. Y se abre un debate sobre el devenir de la liga en comparación tiempos pasados. Hace algo más de una década (2011-2012), la temporada cerró… ¡con 12 anotadores en 20!
Murray se hace fuerte ante Sabonis.
Es un dato salvaje y varios jugadores de la NBA abrieron un debate, pues hace 11 años solo Kevin Durant (28 de media), Kobe Bryant (27,9), LeBron James (27,1), Kevin Love (26), Russell Westbrook (23,6), Carmelo Anthony (22,6), LaMarcus Aldridge (21,7), Dirk Nowitzki (21,6), Deron Williams (21), Blake Griffin (20,7), Monta Ellis (20,4) y David Lee (20,1) eran ‘anotadores’ en más de 20. Los tiempos han cambiado totalmente.
Hay más ritmo y las reglas no favorecen a la defensa
Los jugadores atribuyen ese cambio a la defensa. “Hay más ritmo y las reglas no favorecen la forma de defender”, contó Kyle Kuzma, una de la referencias de los Washington Wizards en la anotación. El ritmo mínimo de un equipo estaba en 89,14 -de los Bulls- en ese curso, entendido como el número de posesiones de un equipo por partido. En la actualidad el que menos genera vuelven a ser los Bulls con 95,88 posesiones. Ese guarismo les colocaría como el que más en aquella 2011-2012 (eran los Kings en 94,68).
También se mojó Dwight Howard, como con casi todo. Es de los que tuvo que reconvertirse de pívot que causaba estragos en la zona a especialista. “Antes jugábamos en cajas y con muchos hombros. La pintura estaba llena, empaquetada”, analizó. Cambia la forma de defender, lo que se permite y se dispara la anotación.
Antes jugábamos en cajas y con hombros
Zubac trata de taponar a Ja Morant.
Un giro gigante para entender el baloncesto. En la NBA se defiende, otra valoración es incorrecta. Pero la anotación se disparó enormemente de cara a otro tipo de juego. Las noches anotadoras ahora son hábito no situaciones extrañas.
